El padre de la Física Española

Este año, se celebra el centenario de una visita que revolucionó el día a día de la ciencia en España y un lanzaroteño fue uno de los protagonistas.

Albert Einstein y Blas Cabrera paseando por Madrid ( marzo de 1923)

Albert Einstein realizó una gira por el mundo tras ganar su Premio Nobel, saliendo desde Alemania en octubre de 1922 hacia Japón. En este recorrido mundial, una de sus paradas  fue España. Entre el 22 de febrero y el 14 de marzo de 1923, Albert Einstein impartió varias conferencias en Barcelona, Madrid y Zaragoza. Como decíamos, esta visita se celebró algún tiempo después de recibir el galardón internacional  más importante en su campo: el Premio Nobel de Física, por lo que su popularidad era máxima. Al contrario de lo que mucha gente cree, no le fue concedido por la Teoría de la Relatividad, sino por el descubrimiento del efecto fotoeléctrico.Realizó su entrada a España por Barcelona el 23 de febrero. Tras impartir varias conferencias, continuó su viaje a Madrid. En Madrid fue recibido por nuestro protagonista: Blas Cabrera Felipe, padre de la Física Española. Durante el mes de marzo,  Einstein siguió repartiendo conocimiento por distintas zonas de la península. Por ejemplo,  el viernes 2 de marzo visitó el Laboratorio de Investigaciones Físicas dirigido por Blas Cabrera. Gracias a estas charlas consiguió un espectacular incremento del interés por la ciencia por parte de la sociedad española. Cabrera fue anfitrión del genio alemán en la capital del reino y se encargó, entre otras cosas, de presentarle al rey Alfonso XIII, quien presenció su conferencia en la Academia de las Ciencias de Madrid. Pero el lanzaroteño fue mucho más que su cicerone, publicó el primer libro sobre la teoría de la relatividad en español.

PERO, ¿QUIÉN ES BLAS CABRERA, ESTE AMIGO DE EINSTEIN?

Blas Cabrera y Felipe nació el 20 de mayo de 1878 en Arrecife, Lanzarote. Estudió bachillerato en La Laguna,  Tenerife, donde se trasladó con su familia. Más tarde se desplazó a Madrid donde estudió Derecho. Sin embargo conoció a Santiago Ramón y Cajal, quien lo convenció para que dejara de lado dichos estudios y que pasara a estudiar algo relacionado con la rama científica. Años más tarde se licenció en Ciencias Físicas y Matemáticas en la Universidad de Madrid y se Doctoró en Ciencias Físicas en 1901 con su famosa tesis: “Sobre la variación diurna de la componente horizontal del viento”, un estudio de cómo variaba la intensidad del viento, en diferentes latitudes del planeta. En 1905, con 27 años ya era catedrático. El catedrático de Electricidad y Magnetismo Blas Cabrera, elegido académico de Ciencias en 1909 y nombrado director del Laboratorio de Investigaciones Físicas en 1910, también debió ser el primer científico español en hablar personalmente con el gran físico alemán en el Politécnico de Zúrich, donde ampliaba sus conocimientos sobre magnetismo con Peter Weiss en 1912.  Aquí comienza su amistad. Entre los años 1910 y 1934 publicó un gran número de trabajos de investigación, pero también de divulgación y difusión de modernas teorías físicas, una labor reconocida internacionalmente.

Se le considera uno de los padres de la mecánica cuántica en el campo del magnetismo por su estudio de las tierras raras. Como reconocimiento a este trabajo, Marie Curie y el propio Einstein propusieron su candidatura al Comité Científico de la VI Conferencia Solvay, cuyo tema principal era el magnetismo. Participó en el Congreso Solvay de 1930. También se le conoce por ser el padre de la Física Española como fundador del primer Instituto en investigación en Física en España, el Laboratorio de Investigaciones Físicas en Madrid.

Tras la sublevación militar contra la República que dio lugar a la Guerra Civil, Blas Cabrera se tuvo que exiliar como tantos otros científicos españoles. Se trasladó primero a Francia y después a México, donde fue profesor de la universidad de la capital desde 1941 hasta su muerte, en 1945. La dictadura franquista le destituyó de sus títulos y reconocimientos académicos en 1941, que le fueron restituidos póstumamente por el Gobierno de España en 2018, a propuesta de los ministros de Ciencia, Pedro Duque, y de Justicia, Dolores Delgado.

Falleció el 1 de agosto de 1945 en la capital de México por la enfermedad de Parkinson a los 67 años.

DESDE MÉXICO A SAN CRISTÓBAL DE LA LAGUNA

El Ayuntamiento de San Cristóbal de la Laguna ha conseguido recientemente la repatriación de los restos de Blas Cabrera y de sus familiares que se encontraban en México. Ha contado con el apoyo de la Universidad de La Laguna,  sobre todo el área de Física, que lleva 10 años trabajando para mantener vivo el recuerdo de una de las personas más destacadas de la investigación no solo en el archipiélago sino también en el ámbito nacional e internacional. Sus cenizas llegaron 12 de octubre de 2022 a la tierra que le vio crecer.

RECUPERAR EL LEGADO DEL CIENTÍFICO ESPAÑOL                                   

También en fechas recientes sus descendientes han logrado recuperar parte del gran legado que dejó su abuelo. Durante casi 40 años el director de la Asociación de Amigos de la Cultura Científica, Francisco González de Posada, mantuvo en su poder varios manuscritos del físico conejero, entre ellos el de su obra “Historia de la Física” o el ya mencionado “Teoría de la Relatividad”. Ha sido necesario un largo periodo de  reclamaciones por parte de distintas instituciones canarias y de sus familiares a las que González de Posada hizo caso omiso durante años. Finalmente, a primeros de diciembre pasado, entregó algunos manuscritos a la Universidad Complutense de Madrid en presencia de una de las nietas de Blas Cabrera. No obstante, la familia ha denunciado que no se han entregado la totalidad de los documentos, por lo que el proceso de recuperación continua.

Albert Einstein tuvo una gran influencia  en la vida y obra de Blas Cabrera y de muchas otras personas amantes de la Física. Su visita a España fortaleció ese vínculo con la ciencia del país y ayudó a su evolución tal y como la conocemos hoy en día. Esta no sería la misma sin la figura del no tan reconocido Blas Cabrera.