________________________________________________________________________________
Según la investigación de una cohorte de biobancos del Reino Unido, acelerar el ritmo al caminar está asociado a la longitud de los telómeros. Un parámetro biológico que está directamente relacionado con la longevidad.
1.¿QUÉ SON LOS TELÓMEROS?
Los telómeros son estructuras que se encuentran en los extremos de los cromosomas, es decir, secuencias repetitivas de ADN (ácido desoxirribonucleico) no codificante y que protegen nuestra información genética durante la división celular de desgastes o enredos. Su tasa de acortamiento, condicionada por la genética y nuestro estilo de vida, puede determinar la longevidad y la salud de nuestro organismo.
La senescencia replicativa es un proceso que consiste en que cada vez que se divide una célula, sus telómeros se acortan, por lo que llega un momento en el que estos se han vuelto tan cortos que la célula ya no puede dividirse. Por ello, la longitud de los telómeros es un tema importante relacionado con la edad biológica.
2. ESTUDIO DE LA UNIVERSIDAD DE LEICESTER
El estudio realizado por la Universidad de Leicester en el Reino Unido analizó a más de 400.000 adultos y encontró una relación entre el ritmo de las personas al andar y un marcador génico de la edad biológica del cuerpo.
Los investigadores midieron el ritmo de la marcha de los participantes del estudio y analizaron su ADN, con estos análisis descubrieron que las personas que caminaban más rápido tenían una edad biológica más joven en comparación con aquellas que caminaban más lentamente.
El estudio además encontró que la relación entre el ritmo de la marcha y la edad biológica era más fuerte en personas mayores de 40 años y en aquellas que tenían un índice de masa corporal más alto. Se estima que caminar a un paso ligero podría suponer una reducción de 16 años en la mediana edad. Los investigadores sugieren que el ritmo con el que se anda es un útil indicador de la edad biológica y que podrá usarse para evaluar aquellas enfermedades de riesgo relacionadas con la edad.
3. Conclusiones
Aunque este tema aún necesita investigación, es evidente que el caminar a un ritmo más rápido tiene aún más beneficios para nuestra salud de los que ya se sabían, esta vez relacionado con la longitud de nuestros telómeros.
Según el profesor Tom Yates: “En este estudio, utilizamos la información contenida en el perfil genético de las personas, para demostrar que un ritmo de caminata más rápido probablemente conduzca a una edad biológica más joven, según lo medido por los telómeros”.
REALIZADO POR: Olaia Maya & Maider Jiménez BACHILLERATO