En los últimos días se ha viralizado un vídeo en el que puede verse lo que parece un reguero de gusanos sobre las calles de Beijín y sobre los coches aparcados en ellas. Se habla de una “lluvia de gusanos”, pero, aunque tuvo mucho de lluvia, quizá no sean gusanos lo que vemos en las imágenes.

Dejando de lado interpretaciones esotéricas o apocalípticas y teniendo en cuenta que las autoridades locales no han dado información sobre el hecho, lo que algunos expertos señalan es que lo que se aprecia en el vídeo no tenga un origen animal sino vegetal.
Los principales sospechosos son los álamos. O más concretamente sus flores. Las flores de álamo se disponen en amentos alargados, pequeños racimos que si caen de los árboles pueden parecer gusanos. No se trata de un fenómeno extraño para los habitantes de la península Ibérica donde las tormentas a veces dejan tras de sí “gusanos” vegetales de nuestras especies autóctonas como el chopo (Populus nigra).

Nosotros nos hemos apresurado a salir al campo a demostrar que las “lluvias de gusanos” no son tales y hemos fotografiado y grabado a nuestros árboles autóctonos en plena floración, auténticos responsables de las precipitaciones vermiformes. Así tendremos avellanos (Corylus avellana) y alisos (Alnus glutinosa), mostrando sus bellos amentos.

¿Y cuáles son las interpretaciones esotéricas? Hay quienes se han apresurado a recalcar que, según los nombres tradicionales que algunas culturas norteamericanas daban a las lunas a lo largo del año, la luna llena que iluminaba esa noche era la luna del Gusano.
Entonces, ¿es casualidad? No necesariamente. Aunque no sabemos qué motivó a los nativos americanos a llamar a esta luna invernal “del gusano” no sería absurdo pensar que estas “lluvias” también puedan darse con especies arbóreas norteamericanas. Tampoco hay que olvidar que los gusanos tienden a aparecer tras las lluvias, por lo que ésta no es una época rara para su aparición.

Alarmar, contar verdades a medias, amarillear las noticias, no trae más de revuelo, desinformación y detrimento del espíritu crítico. Para combatirlo: CIENCIA EN TODO Y PARA TODOS.

1 comentario en “MARZO DE GUSANOS (II): LLUVIA DE GUSANOS.”

  1. Buen enfoque, siempre es importante el trabajo de campo para desmentir ideas descabelladas como ésta. Nos gusta la frase «no se trata de un fenómeno extraño para los habitantes de la Península Ibérica», porque si cualquiera de nosotros hubiera estado en China no habría dudado. Respecto a su coincidencia con esa fase lunar, aportáis buenos argumentos para desmentirlo y ver que se trata de eso, una coincidencia. Según National Geographic, es la última luna llena del invierno, y se llama «de gusano» en referencia a las huellas dejadas por las primeras lombrices de la temporada, que salen a la superficie tras el deshielo propio de esta estación del año, y marcan el inicio de la época de cosechas, así que no tiene nada que ver ¡Buena aportación!

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